Actualmente todos sabemos que la base de una vida saludable es comer bien y hacer actividades físicas. Según la mayoría de los estudios, mantener una vida sedentaria e inactiva incrementa en un 25% el riesgo de sufrir enfermedades cardiacas, en un 45% la posibilidad de muerte por enfermedades cardiovasculares y un 10% la posibilidad de cáncer. La Organización Mundial de la Salud ha considerado a la vida sedentaria como la responsable del 6% de las muertes que suceden. Para la OMS la vida sedentaria es el cuarto factor de riesgo de mortalidad, por ello lo que aconseja es como mínimo caminar 20 minutos al día.
Pero ¿Qué es mejor correr o caminar? La moda de correr se implantó hace unos años, sin embargo, muchos se han dedicado a caminar debido a los efectos secundarios perjudiciales de correr si eres de edad avanzada o posees algún tipo de limitación física.
Si deseas iniciarte en el mundo del ejercicio porque has llevado una vida totalmente sedentaria lo mejor es comenzar caminando, pues es un deporte que puedes realizar durante muchos años. Así mismo, si posees alguna lesión o problema físico como: sobrepeso, problemas en las rodillas o en la espalda, caminar es un ejercicio ideal por ser de bajo impacto. De hecho, caminar es una actividad que recomiendan mucho los médicos para aquellas personas que son diabéticas o han sido operadas de infartos, ya que regula los niveles de glucosa.
Correr quema calorías más rápido, sin embargo, si la persona lo que quiere es quemar muchas calorías de un modo relativamente rápido, correr es mucho mejor. Por ejemplo, caminar 15 minutos equivale a correr durante cinco. Así mismo, una carrera de 25 minutos equivale a caminar una hora y cuarto.
Si eres joven, tienes poco tiempo y quieres quemar grasa, lo mejor para ti es que empieces a correr, aunque de igual modo se pueden quemar muchas calorías caminando, solo hay que invertir mucho más tiempo y en esta época apresurada quizás son pocos los que tienen la paciencia de esperar.
De igual modo, caminar permite interactuar con otros, ir caminando y charlando puede ser relajante para muchos y lo que es más importante los ayuda a mantener la voluntad de sostener ese hábito: “andando percibes detalles del entorno y sentir el momento de un modo que corriendo no puedes vivir, porque tu cabeza está en el entrenamiento, las pulsaciones, el ritmo… Caminar te permite descubrir y sentir” afirman un especialista en un articulo de El Pais.com.
Sin embargo, tanto si caminas como si corres, cualquiera de las dos formas de entrenamiento será mucho mejor que quedarse tumbado en el sofá sin moverse. ¡Actívate, no te arrepentirás!