Foto cortesia de: www.pixabay.com

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Ser vendedor es uno de los trabajos más complicados, pues debes estar atento a las necesidades y demandas de tus clientes e intentar cubrirlas con facilidad. Tener un buen estudio de mercado te abre puertas que jamás hubieras podido soñar y convertirte en un vendedor ejemplar puede hacer la diferencia entre todo o nada. Pero para vender también hay reglas que son fundamentales en el buen rendimiento económico y social.

1.- Sé fiel a ti mismo.

Para poder llevar a cabo este oficio, se necesita tener mucha positividad y ánimos para poder trabajar con todo tipo de público. Esto significa que te gusta el trato social y por esa razón no debes aparentar algo que no eres. Muéstrate tal cual eres, ya que es posible que tus clientes desconfíen de ti y no quieran hacer tratos contigo.

2.- El cliente siempre tiene la razón.

Como buen vendedor, debes estar atento a las necedidades de tus clientes. Escúchalos y no te limites a hablar solo de las ventas. Mantente actualizado cada cierto tiempo para poder satisfacerlos y estar al tanto de cómo va el mercado actual.

3.- Mantén la calma.

Un vendedor no puede mostrarse nervioso ante sus clientes, ya que los estresará y los pondrá tan nerviosos como él. Un buen tono de voz, ni muy alto ni muy bajo, hablar con claridad y sin ir muy rápido, es lo clave para que puedan confiar en ti. Mantén una posición segura mostrando todo aquello de lo que eres capaz laboralmente, sin jamás olvidar la gentileza, el respeto y el buen humor, sin importar el tipo de cliente con el cual te topes, ya que, como dijimos anteriormente, “el cliente sempre tiene la razón”.

4.- Presentación.

La publicidad es una actividad económica que mueve masas y es capaz de hacer que otros adquieran los productos ofrecidos. Debemos dar a relucir los puntos fuertes de nuestros artículos y hacer lo posible para que nuestros clientes se den cuenta de que eso que ofrecemos es lo que necesitan en sus hogares.

5.- Atiende correctamente.

Esto es algo que no todos saben cómo hacerlo. Por un lado están los desinteresador que no prestan su servicio correctamente y por otro, los que acosan al cliente desde que lo ven cruzar la entrada. Para poder lograr que nuestros consumidores adquieran los productos o servicios que ofrecemos, debemos recibirles con una sonrisa, preguntarles si necesitan algo y, sino, estar cerca de ellos pero no encima como si los presionáramos a comprar algo o vigilándolos como viles ladrones.

Recordar en todo momento estas normas básicas podrán ayudarnos en nuestro crecimiento laboral, y a no querer hacer las cosas a nuestro antojo sin antes consultar con aquellos que en realidad necesitan de nosotros.

Fuente: UnTipoSerio