Entregué todo lo mejor de mí, creía que éramos felices pero al final era yo la que idealizaba la relación. Pasé por momentos tristes y duros, pero me levanté y hoy por hoy puedo decir que de esta experiencia aprendí:
1.- Las primeras impresiones son las que cuentan.
Mi ex me plantó en nuestra primera cita, me dio la mejor excusa digna de un premio Oscar, si le hubiese hecho caso a esta primera muestra de irresponsabilidad me hubiese ahorrado un montón de sufrimiento durante estos 10 años.
2.- Como actúan en su vida, actuarán en el amor.
Mi ex no se comprometía con nada. Cambiaba de trabajo, en la casa dejaba todo a medias. Estaba tan ciega que no pude ver que si era incapaz de comprometerse como profesional, menos lo haría conmigo.
3.- La química no lo es todo.
Cuando estábamos juntos veía fuegos artificiales, pero era solo eso, química. De su parte no había algo más allá.
4.- Quizás sea necesaria la experiencia con hombres tóxicos.
es que hasta que no nos tratan mal resulta que no aprendemos a poner límites, a valorarnos y a querernos a nosotras mismas. Ahora ya sé que cuando llegue otra persona a mi vida, no voy a conformar con alguien que me haga sentir miserable cuando sé que no lo merezco.
5.- Si hablas con Dios y le pides que aleje de tu vida todas las cosas malas recuerda que se las llevará así tú no estés conforme.
Esa relación era dañina para mí, lo sabía pero aún me aferraba, hasta que gracias a Dios lo entendí y me liberé de esa carga, me dolió y mucho, pero por primera vez en diez años me siento feliz y libre. Replantéate como te estás sintiendo en tu relación actual, ve si cumple tus expectativas, si te llena.
6.- Una relación es de dos.
Si terminas luchando sola en algún momento todo el peso te caerá encima y la relación se hundirá. Esto pasa simplemente porque es la persona equivocada, cuando llegue la indicada lo verás y te acordarás de haber leído esto.
7.- Durante 10 años yo dejé muchas de mis cosas a un lado por apoyar a mi pareja.
Siempre estaba allí cuando me necesitaba. Pero cuando era él quien debía aparecer para mí por amor, simplemente no estaba, incluso llegué a sentirme muy sola teniendo pareja. Aprendí que quien te ama, busca la forma o se inventa las maneras de estar contigo y para ti.
Después de haber sanado mis heridas puedo decirte que llores todo lo quieras, tómate el tiempo y el espacio para vivir tu duelo, pero déjalo ir. No te sigas aferrando a lo que te hace daño, mírate en mi espejo. Yo aprendí a identificar qué clase de persona quiero para una relación y a ser yo esa persona, porque primero debo amarme para amar a los demás y debo ser el reflejo de lo que quiero que llegue a mi vida.
Eres más fuerte de lo que crees y te aseguro que en poco tiempo estarás riéndote de lo que pasó. Es una experiencia que te hará mejor persona, ya verás.
Fuente: http://mujerypunto.com