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Cuando pasamos por una crisis de pareja, solemos hacer un compendio de consejos que nos puedan ayudar, le preguntamos desde la abuelita hasta la psicóloga que tiene un programa en la radio, recurrimos a los amigos y pare de contar. Muchas de las estrategias que encontramos incluso son disímiles entre ellas, y en un momento, lejos de encontrar una solución a nuestro problema nos vemos inmersos en una maraña de contradicciones.
Es claro que los amigos, los familiares e incluso el internet y la televisión son recursos muy valiosos para conseguir respuestas a preguntas que nos hacemos, pero en este sentido así como hay mucho que aprender, también puede ser un arma de doble filo y causar daños. El Dr. Charles Schmitz experto en parejas, al respecto señala que hay que ser muy cuidadoso a la hora de buscar información y lo primero que hay que sopesar es quien da los consejos y si tiene acreditación académica certificada. Por ejemplo, una persona divorciada más de una vez no es necesariamente la mejor fuente de consejos sobre el éxito en el matrimonio, por eso aparte de las interrogantes anteriores también hay que conocer un poco la vida del experto.
Igualmente es recomendable confirmar si la fuente del consejo es confiable y si se trata de un sitio de internet, si es realmente serio. Confíen en autores reconocidos por los diversos materiales que producen y que demuestran su capacidad y confiabilidad. También es importante seguir nuestros instintos, a veces las cosas simples tienen mucha importancia.
Desafortunadamente, en muchos talk shows populares se ven muchos casos donde se exponen conflictos de pareja, donde el animador e incluso algunos expertos invitados dan su opinión y nosotros los telespectadores tomamos dichas premisas como consejos profesionales adecuándolo a nuestro caso particular; si esto fuera tan confiable al final del programa en letras pequeñas no aparecería la siguiente leyenda: “las opiniones emitidas en este programa no constituyen consejos profesionales, en caso de duda consulte un experto”.
Cada caso es distinto así que cuando lean, escuchen alguna opinión que les interese siempre realicen un análisis que les permita desechar lo que no se adecúa a su problema. Si una premisa no suena bien, probablemente se trate de algo que no es cierto o creíble. Nuestra intuición nos guiará la verdad y será el mejor juez para valorar lo que leemos, escuchamos o vemos.
Recuerde que si de verdad considera que necesita ayuda externa para tratar sus problemas de pareja acuda a un profesional calificado.
Fuente: revistafamilia.com
